La Luna irradia una energía magnética y misteriosa que invita suavemente a la apertura interior.
Simboliza el viaje hacia adentro – para quienes están listos para abrirse al crecimiento espiritual o intuitivo.
La Luna te guía en el despertar de una conciencia más profunda, incluso cuando aún reposa en silencio dentro de ti.
En el camino descubrirás que cada desafío es una puerta hacia un conocimiento más grande y un ser más pleno.